Contrata tu seguro de Hogar con MAPFRE con un descuento del 30% y tendrás incluída:
- reparación de electrodomésticos
- nueva cobertura de atasco
- tu perro protegido
- asistencia informática incluida
Vivimos el presente y aún así podríamos concretarlo más. Vivimos el instante. Organizamos fiestas, reuniones, eventos… Nos presentamos chocando el codo, quitándonos la mascarilla para beber, compartir baños y lavarnos las manos a la entrada de un comercio porque el vigilante de seguridad nos invita a hacerlo. Vemos las noticias después de disfrutar de ese señalado día pensando en: “menos mal que no hemos retrocedido de fase”. Exprimimos lo que tenemos sin pensar en el mañana.
Hay una nueva y renovada normalidad semana por semana, provincia por provincia y ahora pueblo por pueblo.
Estamos agudizando el ingenio para buscar soluciones e inventando excusas que contenten a todos. Empresarios, empleados, gente de vacaciones, deportistas…
Pero nos encontramos con un problema. Una metáfora que se repite que es intentar taparnos el cuerpo entero con una manta demasiado corta. O dejamos los pies fuera o cubrimos la cabeza, pero ambas cosas no podemos hacer.
Atendiendo a los epidemiólogos, virólogos, sanitarios (la ciencia)... hay que hacer un sobreesfuerzo de distanciamiento, sobreprotección y ausencia de exposición de vida social. Sin embargo, necesitamos reactivar la economía, en este caso, contraria a las exigencias médicas. Las empresas y negocios necesitan recuperar la interacción con los clientes, producir y ganar confianza.
¿Quién tiene la capacidad de persuadir más a la clase política, el mundo de la ciencia o el IBEX35?
El equilibrio de estas dos distantes corrientes e inevitablemente condenadas a entenderse, depende del comportamiento humano. ¿Puedo ir con la familia a un hotel o un restaurante sin miedo a contagiarme? ¿Puedo confiar en la persona que me está atendiendo sabiendo que cumple con todas las medidas de salud para que no nos contagie?
Las noticias están siendo curiosamente impactantes. Fiestas locales, botellones, alternativas en forma de concentraciones privadas, conciertos… Ausencia de responsabilidad e integridad humana. Hemos sembrado durante mucho tiempo la creación y evolución hacia una cultura del consumismo inmediato, del carpe diem y de que el futuro es ajeno a mis decisiones. Hemos participado en crear una generación a la que le aplaudimos su “incultura”.
Estamos pidiéndole a una generación que se educó en la pasividad y cero participación social a que ahora tome las riendas de la solución.
Nos estamos jugando nuestra salvación y recuperación de una nueva normalidad estable a una sola carta, a un golpe de suerte, al azar de una VACUNA efectiva.
Mi conclusión final es que no hay “nueva normalidad”, sino el resultado de la recolección de lo sembrado durante una generación “perdida”.
Enrique Jiménez Carnerero. Alumni CEU
Contrata tu seguro de Hogar con MAPFRE con un descuento del 30% y tendrás incluída: